El banco era el último de los cuatro principales de Islandia en ser nacionalizado. Los otros tres fueron absorbidos por la ISFA luego de que el sistema financiero del país se colapsara bajo el peso de la deuda externa en octubre pasado.
La ISFA suspendió a la mesa directiva del banco y nombró un comité que se encargue de la administración luego de un informe de Straumur de que su posición de liquidez ya no era suficientemente fuerte para mantener las operaciones, indica la ISAF en un comunicado.
Straumur ha tratado constantemente de asegurar al mercado que sigue relativamente bien capitalizado y que sus operaciones pueden volverse de nuevo productivas y que su libro de préstamos eventualmente eliminará las provisiones de crecimiento para volverse sustantable.
Pero un colapso en la liquidez global, unido con la continua ausencia de confianza en los bancos islandeses hizo eventualmente imposible que Straumur financie sus operaciones actuales.
Straumur opera en Islandia, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Polonia y la República Checa.
Info: Xinhuanet
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